Tuvieron que pasar 7 semanas para que por fin Mcfadden pudiera romper la barrera de las 100 yardas con los Vaqueros, lo increíble no es que lo haya logrado sino que, lo hizo con tanta facilidad que parece que en verdad la falta de rendimiento se inclina más por el querer que por el poder.

Rompió líneas defensivas, recorrió yardas con mucha facilidad y parece que en semanas pasadas se propuso más el no querer correr que el ayudar al equipo.

Garret tomó una decisión que parecía la correcta, en esta ocasión no funcionó, si bien muchos dicen que Cassel no tuvo un mal partido, se notó la inactividad. ¿Qué necesita un QB para entrar en ritmo?, si recordamos a Cassel con los patriotas el tuvo que suplir al mejor mariscal de campo de la actualidad y no lo hizo de mal manera y a pesar de terminar con temporada ganadora no se pudo meter a los play-offs.

Mucho se dice que con Romo los Vaqueros nunca ganarán un Super Bowl pero por el momento, sin él, ni un partido se puede ganar, todavía falta para su regreso y tal parece que la temporada de los Cowboys terminará la semana entrante.