Perdedor – Laremy Tunsil.

Irreal es la palabra para lo que sucedió con Laremy Tunsil, uno de los mejores linieros ofensivos venidos del colegial para muchos expertos en un tiempo cayó hasta el lugar 13 donde fue tomado por los disfuncionales Miami Dolphins. Con los Titans hace semanas con el pick 1 se esperaba que fuera el primer tomado, sin los Titans y Browns ahí, los Chargers fácilmente se hubieran podido hacer de él. La razón de que se movió tantos lugares fue que unos minutos antes de iniciar el draft salió a la luz un vídeo en su cuenta de Twitter de él fumando en una especie de máscara de gas. Además después en su cuenta de Instagram apareció un mensaje donde le pedía dinero a sus coaches en Mississippi, ni los de la película Draft Day lo hubieran pensado.

Esta mala publicidad le costó cerca de 7 millones de dólares, cada pick tiene un valor para los novatos, que los Chargers no lo tomaran con el pick 3 fue un golpe duro no solo para su imagen y ego si no para su bolsillo. Es cierto que San Diego al final parecía no estar tan vendido con él, Bosa y Ramsey parece estaban antes en su big board, pero lo que es verdad es que los Ravens si consideraban tomarlo y pasaron de él por todos estos problemas.

Quedará marcado toda su carrera por estos hechos, quedó expuesto, está claro que alguien le quería hacer daño, es verdad también que no es la primera vez que un jugador llega a la liga con problemas así, pero hay ejemplos como el de Johnny Manziel que los problemas no lo dejan ser un valor confiable en la liga. Los Dolphins tampoco son una organización modelo en estos momentos, Ndamukong Suh que no es exactamente un ejemplo para los novatos está ahí. La situación para Tunsil no es nada fácil, tendrá que tener mucho carácter para salir de esto.