Es un equipo mal manejado.

 

Tal vez los Packers hace rato no son tan buenos como su record lo refleja y Aaron Rodgers tapaba esos huecos en la organización y a la primer baja de su juego todo sale a la luz. Mike McCarthy, su coach, ha recibido un pase todos estos años por ese anillo de campeón en 2010. Pero en aquel entonces tenían, como los Saints al año siguiente, una defensiva muy oportunista y Clay Matthews estaba en su mejor momento, Charles Woodson mandando desde la secundaria.

Desde entonces McCarthy y el GM Ted Thompson no han podido armar una defensiva parecida a esa. Hay que decir que los picks en la secundaria no han sido malos: Morgan Burnett, Micah Hyde y Ha Ha Clinton-Dix han sido buenas adquisiciones, pero el Front-7 no ha sido bueno, deteniendo la carrera en este arranque eran de los mejores en la liga pero apareció Ezekiel Elliott. En cuanto a los WR tampoco es que tenga a una superestrella en la posición, Jordy Nelson y Randall Cobb son sólidos pero no se si entran en el Top 10, sobre todo en esta época en la que sobra talento ahí. Eddie Lacy tuvo un buen arranque de carrera pero desde entonces entre el mal estado físico y lesiones ha sido una decepción.

En la temporada 2015 Mike McCarty dejó de llamar las jugadas para el dos veces MVP de la liga, para este año volvió a esa labor a tiempo completo pero no ha resultado del todo bien. El puesto del coach puede estar en peligro en un futuro cercano si las cosas no salen como están planeadas, su récord en playoffs desde la victoria en el Super Bowl ante los Steelers no es bueno y que a nadie sorprenda que pronto rueden cabezas en la organización si sigue la racha mala, empezando por el coach.