Mentalidad
No todo es culpa del Tuca, y mucho menos es el principal causal de la derrota de los Tigres. Hay muchas razones, pero otra que me pareció muy clara por más trillada y sencilla que se oiga, es la mentalidad, ojo, no necesariamente me refiero a la mentalidad «ganadora» sino en este preciso caso a la mentalidad de la mayoría de los jugadores que estaban en la cancha en relación a quien quería ganar más la Copa.
En serio, si uno se pone a analizar a detalle lo que significa la Copa Libertadores para los jugadores y afición misma que representaban el día de ayer al River Plate, literalmente para ellos esta Copa era sin temor a equivocarme, más importante que la misma Copa del Mundo. Y eso, se notaba. A cada pelota dividida iban a morir, jugaron los 90 minutos con una intensidad inimaginable, y con ello, lograron vencer el hecho de que el rival tuviera más talento en la cancha.
No digo que los jugadores de Tigres no quisieran ganar la Copa, claro que lo querían, y de hecho cuentan con muchos sudamericanos que conocen lo que es la Libertadores, sin embargo, se notaba una hambre distinta, por un lado un equipo que sabía que era muy importante ganarla y que con ello harían historia, pero que claramente le faltaba esa determinación, misma que fue reflejada en la cantidad de oportunidades de gol que dejaron ir, en cambio por el otro lado veías a 11 jugadores y un cuerpo técnico dispuestos a MORIR en la cancha con tal de levantar el trofeo más importante en toda su carrera.
Nos guste o no, en México seguimos viendo de lejos la Copa Libertadores, pasan los años y ni nos enteramos quien jugó las semifinales o quien salió campeón, a menos que sea un equipo mexicano y en ocasiones ni así se le da la importancia. En cambio, en Argentina y Sudamerica ellos ven la Copa Libertadores como la gloria pura, para ellos las demás copas NO EXISTEN.
